La Administración mendocina trata de aplicar todos los métodos a su alcance para profundizar políticas de Estado que recuperen todo lo perdido en casi dos años de pandemia y por las medidas sanitarias restrictivas que emanaron de ella. Una cuestión para nada fácil si se tiene en cuenta todos los emprendimientos comerciales y agroindustriales que se perdieron, dejando una dura secuela de desocupación.
Por eso, desde que la usina de ideas y proyectos del Ministerio de Economía se dio a conocer el programa ‘Mendoza Activa’, el gobernador Rodolfo Suarez tuvo en sus manos la punta de lanza de una serie de respuestas para un sector privado golpeado, un campo laboral diezmado y un cúmulo de necesidades que complica a los habitantes de la provincia.
El programa, que ya tiene sus dos versiones, llega a una tercera fase que, al decir del Gobierno, se hace necesaria aplicar. Por eso, el ministro de Economía y Energía, Enrique Vaquié, presentó la tercera versión ante la representación política en las Cámaras de Diputados y de Senadores, esperando el respaldo legislativo para que el Mendoza Activa III se transforme en ley.
Sobre los principales aspectos a resaltar de la tercera edición de ‘Mendoza Activa’, el ministro Vaquié destacó: “Lo que hoy presentamos mantiene en vigencia todas las líneas de las otras dos versiones. Además, estamos solicitando una autorización presupuestaria por $20.000 millones para esta nueva etapa, que significará un proceso de inversión privada previo de alrededor de $70.000 millones”.
—Incorporamos algunos ítems que no estaban en el Mendoza Activa II, donde se amplía la línea para los que construyan su primera vivienda. Estos, además de recibir el 40% de reintegro que venían trayendo en las líneas anteriores, sumarán un 15% extra que recibirán apenas se firme el contrato.
“Será como un anticipo para que puedan comenzar con la compra de los materiales y con la construcción. A partir de ahí, entrarían luego en el 40% común que teníamos hasta ahora, en el proyecto de viviendas”, explicó el funcionario.
Otro aspecto que el ministro destacó en la entrevista es “la preocupación del Gobernador en una economía que todavía sufre los efectos de la pandemia, la inflación y la caída de la actividad, que produce impacto en la no generación de empleo privado”.
—Habrá un plus a los que generen empleo privado. Esto puede llegar desde 40% de reintegro o el subsidio provincial hasta el 50%, en una escala que parte del 5% extra si se incrementa el empleo y 10% extra si ese incremento supera el 50% de la planta de empleados que tenía en el momento en que comenzó la actividad.
