Este jueves, la Cámara de Diputados de la Nación aprobó y dio sanción inicial a la iniciativa de modificación a la Ley de Tránsito y de esa manera se intenta prohibir absolutamente el alcohol al volante, proyecto que es ampliamente rechazado en Mendoza. Los principales opositores son el sector vitivinícola, empresarial y turístico. Entre otras razones, las industrias afectadas esgrimen que la prohibición absoluta no bajará las muertes al volante, que en general se producen con mucho más que los 0,5 mg de alcohol en sangre que hoy permite la ley a los conductores. La discución es entre no manejar si bebiste, o castigar al que registre aunque fuere 0,5 mg entre conductores particulares. En casos especiales, la tolerancia cero ya existe. Como en el transporte público, de cargas, vehículos como ambulancias, bomberos o policías, y otros conductores profesionales.
El proyecto es impulsado por distintas ONG de familiares de víctimas de conductores alcoholizados, entre ellos las "Madres del Dolor". Había sido presentado en el Congreso por el Frente de Todos pero era impulsado por la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), el organismo dependiente del Ministerio de Transporte. La medida busca prohibir la conducción de vehículos a personas con graduación de alcohol en sangre superior a cero, una obligación que actualmente solamente aplica a conductores profesionales.
La norma vigente autoriza hasta 0,5 gramos de alcohol por litro de sangre para conductores de automóviles y 0,2 gramos en el caso de motociclistas.
Normativa
Se quiere incorporar en la ley: "Queda prohibido conducir cualquier tipo de vehículo con motor con una concentración de alcohol superior a cero (0) miligramos de alcohol por litro de sangre".
Penas
Condena de prisión de dos (2) a cinco (5) años e inhabilitación especial, en su caso, por cinco (5) a diez (10) años el que por la conducción imprudente, negligente o antirreglamentaria de un vehículo con motor causare a otro la muerte. Condena de uno (1) a tres (3) años de prisión e inhabilitación especial por dos (2) a cuatro (4) años por lesiones ocasionadas.
Existen casos para aumentar la pena y/o inhabilitación, por ejemplo si el conductor se fuga o no intenta socorrer a la víctima; si está bajo los efectos drogas tóxicas, estupefacientes y/o sustancias psicotrópicas; por exceso de velocidad o pasar un semáforo en rojo.
Los argumentos del proyecto
El proyecto de ley marca que la OMS (Organización Mundial de la Salud) señala que son varios factores los que aumentan la probabilidad de siniestros viales y, entre ellos, está la el consumo de alcohol.
El proyecto, además, manifiesta que "hoy en nuestro en país es muy difícil que una persona purgue una pena de prisión luego de haber cometido un ilícito vial, esto garantiza la impunidad de los conductores imprudentes quienes se saben de antemano, libres de toda consecuencia en caso de matar o lesionar gravemente a una persona".
Qué se dice en Mendoza
Martín Hinojosa, titular del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), expresó en Radio Nihuil que hay preocupación en las bodegas y en los productores por el proyecto. "Por un lado tenés los accidente de tránsito y tenés que ponerte del lado del que tuvo el accidente. Centrarse en el control es la clave. Si bien el INV es parte de la Coviar, de alguna manera lo estamos acompañando y se hace difícil plantear una postura cuando del otro lado tenés accidentes de tránsito", explicó.
En el Congreso, la diputada mendocina Jimena Latorre (Juntos por el Cambio) dijo en su discurso que hay acuerdo generalizado en reducir los siniestros viales pero no hay acuerdo en cómo. "La modificación que se propone no va a cambiar en nada la realidad. Es pura demagogia. Es cambiar la tolerancia de alcohol en sangre permitida para conducir sin cambiar las sanciones para el que infrinja esa tolerancia. Es prohibir sin posibilidad de castigar", determinó. Criticó también que, si se aprueba, hay fallas en quién aplica las sanciones y quién sanciona.
Votación en el Congreso
La votación a favor de la modificación al proyecto fue abrumadora: 193 votos positivos, 19 negativos y 4 abstenciones.
Votaron en contra los diputados y diputadas de Juntos por el Cambio que representan a Mendoza (Julio Cobos, Jimena Latorre, Omar De Marchi, Pamela Verasay, Lisandro Nieri y Álvaro Martínez).
En el Frente de Todos hubo división mendocina: dos votos a favor (Adolfo Bermejo y Liliana Paponet), uno en contra (Eber Pérez Plaza) y una abstención (Marisa Uceda).
