Los supermercados de Mendoza vuelven a sufrir una situación crítica, ya que la falta de productos se convirtió nuevamente en una realidad en estos establecimientos.
La escasez de artículos tales como el aceite, el azúcar y la leche alarman a los clientes, que deben limitar su comprar a cierta cantidad de unidades, ya que los hipermercados intentan que la mercadería alcance para todos.
El desabastecimiento es evidente, y no solamente alcanza a los artículos anteriormente mencionados, sino que también se observa esta problemática en la mayoría de los productos de los hipermercados.
Otro de los grandes problemas es la escasez de marcas para elegir: las principales no están disponibles, y los clientes se deben conformar con las pocas opciones que se observan en las góndolas.
Sobre esta situación se expresó el encargado de uno de los supermercados, que en diálogo con MDZ, afirmó: "Los límites que se ponen para la compra de artículos es porque hay un cierto stock por mes, y debe alcanzar para todos los clientes, y lo mismo ocurre con las primeras marcas, en las que nos provisionan una determinada cantidad de productos, y lógicamente, son los que primeros se agotan", sentenció.
Uno de los productos que sufre una clara falta de abastecimiento, es la carne. En varios de los hipermercados visitados, se observaban la mayoría de las góndolas prácticamente vacías, y aunque se podía apreciar algún que otro estante con unos pocos cortes (sin variedad), lo concreto es que los productos en stock no alcanzan para todos los clientes que acuden a estos establecimientos.
Esta realidad fue notada por Patricio, un turista chileno que viajó a conocer la provincia, y que le aseguró a este medio haber visitado hace unos días atrás uno de los supermercados, y comenta que ese día encontró muchos más productos de los que había hoy.
En esa sintonía se manifiesta Magalí, otra clienta del establecimiento, que además sospecha que este faltante de artículos se debe a inminentes aumentos de precios.
"Una imagen vale más que mil palabras", reza un famoso dicho, y si bien los encargados ratifican su versión de la historia, la realidad que se encuentra a simple vista, evidencia que el escenario es otro. La falta de productos de primera necesidad, el límite de compra por grupo familiar, y la no disponibilidad de artículos son hechos innegables.
El desabastecimiento en los supermercados de Mendoza existe, y será cuestión de días ver si la situación mejora o si la falta de productos se convierte en rutina.
